Ha devorado más de 8 mil 300 hectáreas en el sur de California y obligado a la evacuación preventiva de casi 8 mil personas
Redacción
LOS ÁNGELES, EU.- Más de 22 mil bomberos seguían combatiendo este lunes el llamado incendio ‘Apple’, que ya ha devorado más de 10 mil hectáreas en el Cherry Valley y el bosque nacional de San Bernardino, en el sur de California y obligado a la evacuación preventiva de casi 8 mil personas.
Por la noche de ayer, los bomberos lograron contener el 5 por ciento del incendio, tras haber perdido el control de las llamas durante la tarde, según la última actualización del Departamento de Silvicultura y Protección contra Incendios de California (CAL FIRE, en inglés).
Se espera que siga fuertemente activo en las próximas horas, debido a las altas temperaturas y la sequía.
El humo del incendio ‘Apple’ llega a varias millas de distancia. De hecho, el Servicio Meteorológico Nacional publicó imágenes tomadas por sus satélites que muestran que el humo llega hasta Phoenix (Arizona), a más de 310 millas (500 kilómetros) de distancia.
Incredible GOES-West satellite imagery showing smoke from the #AppleFire making it all the way to #Phoenix this morning!????#CAwx #AZwx pic.twitter.com/lTAALjAXnL
— NWS San Diego (@NWSSanDiego) August 2, 2020
Durante la madrugada del lunes, 2 mil 260 bomberos, asistidos por helicópteros y camiones, estaban desplegados en la zona.
En concreto, el incendio ha carbonizado ya 10 mil 703 hectáreas (26 mil 450 acres).
En un comunicado, las autoridades consideraron que el fuego estaba “muy activo” durante domingo por la noche y el lunes por la mañana, cuando “múltiples focos” estallaron en el lado norte del perímetro.
“La actividad del fuego está impulsada principalmente por el bajo contenido de humedad de la vegetación, combinado con altas temperaturas y baja humedad relativa. Estas condiciones contribuyen al comportamiento activo del fuego tanto de día como de noche”, describió el CAL FIRE.
Al menos 2 mil 600 viviendas y casi 7 mil 800 personas han tenido que ser evacuadas cerca de San Bernardino, ubicada un centenar de kilómetros al este de Los Ángeles.
También ha habido residentes de las áreas de Oak Glen y Potato Canyon, en el vecino condado de San Bernardino, a los que se les ha pedido que desalojen sus casas como medida de precaución.
Los vecinos evacuados están siendo alojados temporalmente en hoteles locales y en las instalaciones de una escuela secundaria de la localidad, manteniéndose los protocolos necesarios por el COVID-19, con el control de temperatura al llegar, las distancias de seguridad y el uso de mascarillas.
Con información de Univisión
